Los Miserables: I.5.7

Los MiserablesPrimera parte: "Fantina"Libro quinto: "El descenso"Capítulo VII: Triunfo de la moral de Víctor Hugo Tal era la situación cuando volvió Fantina. Nadie se acordaba de ella, pero afortunadamente la puerta de la fábrica del señor Magdalena era como un rostro amigo. Se presentó y fue admitida. Cuando vio que vivía con su trabajo, tuvo un momento de alegría. Ganarse la vida con honradez, ¡qué favor del cielo! Recobró verdaderamente el gusto del trabajo. Se compró un espejo, se regocijó de ver en él su juventud, sus hermosos cabellos, sus hermosos dientes; olvidó muchas cosas; no pensó sino en Cosette y en el porvenir, y fue casi feliz. Alquiló un cuartito y lo amuebló de fiado sobre su trabajo futuro. No pudiendo decir que estaba casada, se guardó mucho de hablar de su pequeña hija. En un principio pagaba puntualmente a los Thenardier; les escribía con frecuencia, y esto se notó. Se empezó a decir en voz baja en el taller de mujeres que Fantina...

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