Capítulo 20: La embajada de Silver
La isla del tesoro Capítulo 20: La embajada de Silver de Robert Louis Stevenson Dos hombres se acercaban a la empalizada; uno de ellos agitaba una tela blanca y el otro, que avanzaba con toda calma, era en efecto nada menos que el propio Silver. Creo que fue el amanecer más frío que yo había vivido hasta entonces y al raso. El cielo brillaba sin nubes y las copas de los árboles reflejaban el suave tono rosado del sol naciente. Silver y su ayudante estaban parados en una umbría, como emergiendo de una espesa niebla que les alcanzaba hasta las rodillas y que no era sino la humedad de la ciénaga. Aquella bruma y el frío del alba indicaban la insalubridad de la isla, un lugar propio a las fiebres. -Que no salga nadie -dijo el capitán-. Diez contra uno a que se trata de una artimaña. Entonces gritó al bucanero: -¿Quién va? ¡Alto o disparo! -¡Bandera de parlamento! -gritó Silver. El capitán estaba en el porche, a cubierto de cualquier disparo traicionero. Se...
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