¿Qué es el grabado al hilo y el de testa? Las maderas grabadas se utilizaban ya antes del 1500 para ilustrar los libros impresos. Se trata de formas impresoras cuyo relieve es lo que recibe la tinta, como los caracteres de imprenta. La madera grabada «al hilo» recibe esta denominación porque las fibras leñosas son paralelas a la superficie de las planchas. Esta especialidad, en la que se emplea una pequeña gubia (formón de media caña), alcanzó su apogeo durante el Renacimiento. La madera grabada «de testa», técnica nacida en el s. XIX, se trabaja con un buril, como los metales, lo que es posible porque las fibras del trozo de madera son perpendiculares a la superficie del plano impresor. Este método de trabajo de la madera hace que el artista no se vea obstaculizado en su obra por la dirección de las fibras y así pueda grabar mayor cantidad de detalles.